Fue un fin de semana gris como el tiempo...
La vida te da y te quita todo el tiempo, pero esta vez fue muy injusta.
Este fin de semana falleció un amigo y realmente sigo shockeada.
Era un chico, con toda la vida por delante, estaba luchando por su vida en el sanatorio, después de un accidente que fue de público conocimiento; el caso de la parejita a la cual le explotó el gas en el depto de Pinamar.
Ella sigue en coma farmacológico para poder seguir con las curaciones sin que sea tanto el sufrimiento, pero creo que no va a haber coma que le evite el sufrimiento de la noticia que la espera una vez que se reponga.
Realmente me siento muy conmovida y creo que ningún padre está preparado para la muerte de un hijo, no es justo, no es "la ley de la vida" ni el "ciclo" de la misma.
Acompañé a la familia en este inmenso dolor, a los amigos, a los colegas, que demostraron que Nacho fue un excelente hijo, excelente hermano, un amigo ejemplar y un muy buen compañero de trabajo.
Rezo por todos ellos para aliviarles el dolor del alma...